Q&A con Bichi Wines
En las montañas del norte de Baja California Norte se encuentra Bichi, casa productora de vinos naturales expresivos, auténticos y únicos. Bichi es una de las primeras etiquetas de vino natural proveniente de Tecate, Baja California y ha puesto en la escena mundial uno de los proyectos más exitosos y emocionantes del vino natural. Bichi fue fundada en el 2014 por la familia Téllez, quienes se mudaron a Baja California desde Sonora, de ahí el nombre Bichi, que significa desnudo en el dialecto Yaqui. Hoy en día la vinícola es manejada enteramente por Noel Tellez quien es conocido por su enfoque innovador, adoptando variedades de uva desconocidas.
Tuvimos la oportunidad de entrevistar a Noel para que nos platicara un poco del proyecto Bichi, los retos y el futuro para esta vinícola.
Noel con Salvaje Vinos
SV: ¿Cómo nace el proyecto de Bichi?
NT: La vinícola Bichi se creó en el 2014. Es un proyecto que nació de la pasión, la espontaneidad y la frescura de ideas que se dieron entre Louis Antoine Luyt, mi hermano Jair Téllez, mi madre y yo, Noel Téllez.
Louis Antoine es de origen francés y es enólogo en Chile con mucha experiencia, 13 años en ese entonces, haciendo vino natural. Jair es chef de restaurantes como Laja en Valle de Guadalupe, y Merotoro y Amaya en CDMX. Mi madre, enfocada en la parte agrícola, fundó las bases de la agricultura biodinámica en la vinícola. Yo en ese momento ejercía de abogado, pero ya tenía medio pie en el mundo del vino. En cuanto nació Bichi, me dediqué por completo al proyecto.
Bichi también nace de las ganas de hacer algo distinto. Ya habíamos pensado en hacer algo con la agricultura sin químicos pero nos faltaba darle un enfoque, que después fue la biodinámica. Cuando nos encontramos con Louis Antoine conectamos y la explosión de ideas y de ganas de hacer las cosas se dieron de forma natural.
SV: ¿Vienen de familia de viticultores o enólogos? ¿Qué los llevó a dedicarse al vino?
NT: Para nada, nosotros venimos de una familia muy inquieta, de una madre que tiene una gran pasión por los alimentos, la cocina, siempre buscando hacer cosas nuevas. Eso se nos heredó, por ejemplo, Jair en la cocina, y yo involucrado en la agricultura orgánica. Louis Antoine Luyt no viene de una familia de viticultores pero sí de una familia artística.
Creo que todos los involucrados en el proyecto somos de una mente muy creativa.
SV: ¿Quienes conforman Bichi actualmente?
NT: Actualmente yo soy el único que se mantiene en el proyecto. Como en las bandas de Rock & Roll que se empiezan a desmembrar, algo así sucedió en Bichi.
Jair se enfocó más a la parte gastronómica y a su distribuidora de vino natural; Louis Antoine se mudó a Francia con su familia para mejorar su calidad de vida pero sigue haciendo vino en Chile; yo me dedico 150% al tema del vino, elaboración, distribución y todo; y mi mamá se mudó a Cuernavaca y sigue encantada con el tema de las plantas.
Existe un personaje muy importante que se sumó a Bichi en el 2016, un amigo de Louis Antoine Luyt, Yann Rohel, con quien sigo trabajando. Yann y Louis Antoine fueron aprendices de Marcel Lapierre en Beaujolais.
Noel Tellez
SV: ¿Quién los inspira, algún enólogo que admiren?
NT: Admiro no precisamente a enólogos sino a productores de vino, a las personas que parten de la agricultura, que tienen viñedos increíbles y que por ende hacen vinos increíbles. En particular tengo admiración por Elisabetta Foradori, Arianna Occhipinti; por amigos míos en España desde Oriol Artigas hasta la gente que hacen los Envínate, que son un grupo de enólogos por los que tengo mucha admiración y me encantan sus vinos. Desde luego en España a grandes personajes en el mundo del vino natural como Laureano Cerres, y algunos otros en Francia e Italia.
SV: ¿Cuáles han sido los mayores retos que han enfrentado con Bichi?
NT: Esta pregunta es buena. En realidad los retos han sido año tras año, mes tras mes, han sido de momento a momento. Como Bichi ha sido muy vertiginosa en su desarrollo, su crecimiento y su evolución, sí hay grandes retos.
Alguien me hizo una pregunta algo parecida hace tiempo, y yo sigo pensando lo mismo: el gran reto siempre han sido las relaciones humanas dentro del grupo, con los productores y con las mismas vides. El gran reto de la humanidad, ¿no?
Para mi, ese es el tema más fuerte. Por supuesto también hay retos económicos, y otras dificultades. Cada vez es más obvio que hay menos uvas, sobre todo menos uvas de temporal. Es muy difícil encontrar uvas orgánicas y de calidad. Y este es un reto que viene en el futuro: la materia prima.
Yo lo pondría así: Primero las relaciones humanas y luego, la materia prima con la que vamos a trabajar, porque es un verdadero reto con el cambio climático.
SV: ¿Por qué es importante para ustedes la agricultura orgánica, biodinámica y los vinos naturales?
NT: Parecería obvia la respuesta, tal vez no lo es, pero es importante la agricultura orgánica. Y no hablamos de certificaciones, sino de viñedos donde no se agregan químicos en la agricultura y hay un entendimiento con lo que es el suelo, la planta y los nutrientes para la planta y toda esa interacción. Es importante porque de ahí es de donde partimos.
Y va en ese orden. Primero es el suelo, luego la planta, luego los humanos y luego el vino natural. La verdad es que no puedes hacer vino natural sin la agricultura orgánica. Puedes hacer algo que quieras creer que es vino natural pero, al final, la base está en la agricultura.
SV: ¿Quién diseña las etiquetas? ¿De dónde saca la inspiración?
NT: Yo creo que es una pregunta para el diseñador. Las etiquetas las diseña un artista de República Dominicana. Nosotros de alguna manera le hemos dado cancha muy amplia para expresarse y ha sido un reto más de Bichi, porque a veces no se transmite exactamente lo que nosotros queremos transmitir. A veces el artista es egocéntrico, a veces el artista quiere transmitir y es complicado y lo entiendo, porque virtualmente no está ahí, no está en los viñedos.
Creo que las primeras etiquetas, sobre todo, transmitieron esa cuestión de frescura, de romper esquemas, y esa parte yo la entendí muy bien del diseñador en ese momento. Después se fue volviendo un poco más complicado.
SV: ¿Cómo ven a Bichi en 5 años?
NT: Es un verdadero reto y vienen retos muy fuertes. Yo a Bichi lo veo con los mismos elementos con los que inició y buscando ser muy creativos. Creo que el mayor reto para Bichi va a ser la agricultura; seguir haciendo plantaciones nosotros mismos, ser impulsores o impulsar a una red de productores en la región de vides orgánicas, sostenibles, y sin químicos, y ser una parte importante de ese desarrollo. Eso es lo que nos va a hacer fuertes.
Otro tema que traemos es el desarrollo en la elaboración (del vino). Nosotros vamos hacia un futuro en el que tenemos mucho más claro lo que queremos elaborar y cómo lo queremos lograr, queremos hacer vinos de guarda. Nuestro propósito no es solamente seguir creciendo sino hacerlo de una manera ordenada.
Creo que Bichi se debe de convertir en un participante activo en el crecimiento y desarrollo dentro de los personajes que quieran hacer vino natural en México.
SV: ¿Qué piensan del uso de sulfitos?
NT: Es un tema que en realidad no debería ser tan controversial. Se usan cuando se tienen que usar, obviamente con el criterio de que es un veneno y hay que usarlo en las mínimas cantidades, y pues a veces se tienen que usar. Si decides no usarlos tienes que mejorar muchísimo la agricultura y hacer un buen trabajo en bodega. Aun así, haciendo un buen trabajo en bodega y teniendo una agricultura sana, nosotros a veces tenemos vinos que vienen un poco frágiles. Y pues tenemos que agregar, una gota, no tenemos ningún remordimiento.
No somos partidarios de que eso sea un tema de discusión. Claro que tenemos un punto de vista cuando creemos que las cantidades que se usan son elevadas y se convierten en un maquillaje.
SV: ¿Cómo ven el mercado de los consumidores de vino natural en México? ¿Ha cambiado desde que empezaron con el proyecto?
NT: Totalmente. En el 2014 no había nada, no se mencionaba nada. Ha cambiado para bien, hay más productores, mucho más consumidores, gente más interesada en este tipo de productos. Van a faltar productores y seguramente saldrán productores “imitadores” o quienes lo hagan por la moda, y todo está bien. Es mejor que haya un movimiento a que no haya. Las cosas van a entrar en su justo equilibrio en algún momento.
SV: ¿Por qué nosotros como consumidores deberíamos de estar bebiendo vino natural?
NT: Yo no creo que sea así. Si fuera así el caso, no habría vino natural porque se acaba. Decía un amigo Joan Ramón Escoda “El día en que el consumidor empiece a beber vino natural, se acabó el vino natural, porque no hay para todos”, esa es la realidad. No existe la oferta suficiente, entonces por favor que no se vengan todos.
Que haya un crecimiento, que la industria se empiece a desarrollar, y se haga más consciente. Que vean esto como algo que vale la pena, el convertir la zona de Baja California como una potencia de productores de vino natural. Tendríamos que producir más agricultura orgánica y eso nos beneficiaría a todos.
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